Reinventar la rueda
Vivimos en un mundo que se ha vuelto moderno, que cada vez va más rápido. En el que los usuarios son cada vez más los que controlan los productos que desean gracias a las redes sociales y en las que las empresas aprovechan esa información para darle al cliente lo que quiere, no lo que creía que quería como antes de darse cuenta de esta ventaja.
Ahora todas las empresas quieren innovar y todos los clientes quieren aportar su granito de arena en esa innovación. Pero, ¿que es realmente innovar? ¿Es inventar algo nuevo? No necesariamente, y no siempre.
La importancia de aportar valor
Cuando hablamos de innovar, nos movemos en una definición muy amplia en la que entran en juego todos los elementos asociados a un producto (precio, canal, marca, producto…) Por lo que tenemos que clasificar esa innovación en diferentes tipos según el elemento y según como haya sido esa novedad. Nos encontraremos además con innovaciones en las que no solo participa un elemento si no varios.
Una de las innovaciones más frecuentes es la innovación en el producto de performance que consiste en crear un producto nuevo que aporte valor o cubra un problema o simplemente aportarle un nuevo valor a un producto ya existente. Esta última forma tiene un matiz y es que ese valor añadido debe ser realmente de calidad y aportar soluciones a los usuarios. Por ejemplo, y ya que hablábamos de redes sociales, personalizar los productos es un tipo de esta innovación, los clientes tienen ahora la facilidad de comunicarse con las empresas de forma directa e indicarles exactamente que producto quieren o necesitan, esto da la posibilidad de tener un producción flexible para crear el mismo producto con distintas características para cada cliente, ya sean de las herramientas que ofrece un servicio, los colores y las características físicas, en las que cada vez encontramos más opciones. Si nuestro producto no aporta nada nuevo de calidad o no resuelve ningún problema de nuestros clientes (por tanto no tenemos rango de mercado) no podemos estar hablando entonces de innovación de tipo performance.
Tácticas de innovación performance
La innovación performance distingue entre características y funcionalidad de un producto, y busca mejorar alguna de ellas o las dos, creando un nuevo producto o mejorando las características de otro que ya estaba en su línea de venta, y normalmente es lo que la mayoría de las personas entiende por innovación, cuando es solo uno de los diez tipos que existen, además en la mayoría de las ocasiones es la que es más fácil de copiar por los competidores, es una innovación que, sin dejar de ser una ventaja para la empresa, no lo será a largo plazo. En los últimos 10 años es en la que más invierten las empresas, sobre todo debido a la presión por parte de los clientes que están constantemente demandando nuevas características sobre sus productos. En la siguiente gráfica podemos ver esta comparativa con respecto a los demás tipos de innovación.
El problema de los productos surgidos de esta forma es que la mayoría de ellos tienen un periodo muy corto de vida, bien porque no ha llegado a los clientes o no ha resultado ser el producto esperado, o porque rápidamente surge una nueva mejora que suple algo anterior y se sigue trabajando en esa línea, dejando de crear la versión anterior del producto. En este hecho también influyen la rapidez con que los competidores toman esa mejora y la copian, lo que demuestra las razones por las que no podemos mantener esta ventaja a largo plazo. Por suerte son innovaciones con las que rápidamente cubriremos los gastos de inversión, siendo estos además generalmente bajos.
Algunas estrategias englobadas en este tipo de innovación son añadir funcionalidad al producto, mejorar su conservación, su facilidad de uso, hacer más atractiva la funcionalidad, que sea más ecológico (e producción o residuos), agregarle características o centrarnos en alguna de ellas, simplificar su funcionamiento, hacerlo más seguro, cambiar su diseño o que sea personalizable o aumentar o reducir la calidad del producto (crear un producto de gama superior o inferior).
No podemos olvidar que innovar no es escoger un solo tipo, si no que el desarrollo de distintos productos tomará características de cada tipo de innovación. Una empresa ya asentada hará pequeñas (o grandes) innovaciones de pocos tipos de forma conjunta o separada sobre un servicio o producto, pero la creación de toda una empresa innovadora es posible que tenga que inventar recursos en innovar en la mayoría de estos tipos (crear el producto, el canal y el modelo de negocio…) sobre todo si no quiere en basarse en modelos, características o productos de otras empresas.
Ref.: Ten Types of Innovations
Mª Isabel Peña Martín
